¿Es necesario asistir a una iglesia? Quizá usted es de los que piensa: «Yo no necesito ir a la iglesia. Me gusta pasar mi tiempo a solas con Dios, y no necesito estar con otros cristianos».
Sin embargo, ningún cristiano puede soportar o prosperar durante mucho tiempo si vive aislado y sin el apoyo de una iglesia. No importa cuántos libros cristianos, revistas, CDs y películas tengan, la realidad es que la experiencia y el compañerismo que se obtienen de asistir a la iglesia y estar con otros creyentes son insustituibles.
Una de las claves para el crecimiento espiritual es llegar a formar parte de una iglesia local. La iglesia debe ofrecer una buena enseñanza bíblica, verdadera adoración, una atmósfera en la que los cristianos puedan utilizar sus dones y habilidades dados por Dios y, el liderazgo espiritual que le ayudará a mantener a los creyentes responsables.
En el libro de Hebreos, dice: «Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.» (Hebreos 10:24-25).
La Biblia tiene mucho que decir acerca de las características de una iglesia saludable y vibrante, y usted puede medir su vitalidad comparando sus cualidades con las características de la iglesia del primer siglo (Hechos 2:42, 44-47).
Una iglesia saludable se reúne periódicamente, otorga una alta prioridad en el estudio de la Biblia, desarrolla a laspersonas que cuidan y se preocupan por el desarrollo y el bienestar espiritual de cada miembro. Reconoce el poder de la oración y la adoración corporativa y demuestra el amor de Cristo de manera significativa. Sus miembros desean servir a los demás y tratan de compartir las buenas nuevas de Dios con los demás.
En cualquier iglesia cristiana centrada en la Biblia, las siguientes creencias deberán ser obvias:
• La Biblia se mantiene como la Palabra inspirada e infalible y autoritativa de Dios (2 Timoteo 3:16).
• Dios es eternamente existente en tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo (Juan 14:26, Mateo 28:18, 19).
• La salvación es el don gratuito de Dios a todos los que se arrepienten de sus pecados y la aceptación de Jesucristo como Señor y Salvador es la única manera de entrar en una relación con Dios (Juan 14:6, Efesios 2:8-9).
Una iglesia saludable es también una iglesia en crecimiento. Pero el crecimiento por sí solo no necesariamente debe ser visto como prueba de la bendición de Dios. Los primeros discípulos de la iglesia primitiva tenían una «alegría y sencillez de corazón». Su iglesia debe ser un lugar donde usted sienta el deseo de asistir no sólo los domingos, sino durante la semana.
Si por el contrario, usted se siente incómodo con su iglesia, puede ser el Espíritu Santo que le dice que la iglesia no es bíblica. A medida que usted crezca en su comprensión de las Escrituras y en su buscar la voluntad de Dios mediante la oración, será capaz de discernir la verdad del error.
Evite cualquier grupo que enseña doctrinas, creencias o rituales que se apartan de la Biblia. Muchos falsos maestros hablan sólo partes de la verdad. La mayoría de estos cultos son identificables porque se niegan a:
• Adherirse únicamente a los libros de la Biblia. En cambio, añaden sus «revelaciones especiales».
• Aceptar que nuestra relación con Jesucristo ha sido provista por Dios a través de Su gracia y se recibe a través de la fe. En su lugar, ejercen la práctica de la salvación por las obras.
• Reconocer a Jesucristo como el Hijo divino de Dios y darle el pleno reconocimiento que se merece, como Dios y único redentor.
Los cultos comúnmente conocidos son los Testigos de Jehová, los Santos de los Últimos Días o mormones, la Iglesia de Unificación, unitarios espiritistas, y los cientólogos.
Encuentra tu lugar
Se ha dicho con acierto: «La iglesia es un hospital para los pecadores, no un museo para los santos». La comunión y la participación regular en la iglesia para un discípulo no puede ser exagerada. Al llegar a la iglesia y encontrar su lugar en él, entonces estará en condiciones de dar a otros lo que Dios le ha dado.
La iglesia adecuada para usted será aquella donde pueda crecer en su amor por el Señor y donde pueda servir contribuyendo a la vida de la iglesia. Recuerde que todos somos pecadores haciendo nuestro mejor esfuerzo para seguir las enseñanzas de Dios. Confíe en que Él le muestre el camino.
Recuerde que el modelo de una iglesia que honra a Dios está en las Escrituras. Ore para que Dios le dirija al lugar que Él ha preparado para usted.
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