Colombia (Cristianos.com).- En un concierto gratuito y al aire libre, que congregó más de cinco mil personas en un céntrico parque de la capital colombiana, se demostró que la música urbana sigue su constante evolución como herramienta evangelística de gran alcance.
A pesar del frío de la noche, de una ciudad que está geográficamente a más de 2.600 metros sobre el nivel del mar, la convocatoria realizada a través de los principales medios cristianos de comunicación dio su resultado durante el pasado fin de semana, en uno de los mejores eventos que Bogotá ha visto en los últimos días.
La verdad, el estigma marcado por el hecho de ser un concierto de carácter gratuito, hacía pensar que el montaje y la logística no serían suficientes para suplir los requerimientos de unos invitados de talla internacional como el dúo Triple Seven. Sin embargo, God Music Productions, organizadores del evento, no escatimó sus recursos para demostrar que se pueden hacer eventos de calidad, a la misma altura de los recitales pagos.
La ardua jornada, comenzó con la presentación de los talentos emergentes de AC Jordan, Gospel Sound y Ágape, que fueron el abrebocas para la espectacular salida de Picco, quien estrenaba su segunda placa De Corazón a Corazón; fuegos artificiales, bailarines, luces, serpentinas y sonido, capturaron la atención de los asistentes, que poco estaban acostumbrados a un montaje de esta índole, para un evento de música urbana.
Varios minutos después, la aparición del pequeño Andrés Parra, en la canción Ocho Octavos de Amor, fue el clímax de una vibrante presentación; allí el adolescente de 15 años mostró por que llegó a ser, en su momento, una de las voces preseleccionadas del reality cazatalentos Factor X.
Finalmente, llegó el plato fuerte de la noche, la aparición de Triple Seven con lo mejor de su repertorio; canciones de sus diferentes trabajos discográficos fueron el deleite de un público que permaneció de principio a fin coreando y gozando con las líricas de Abbie y Pichi, los jóvenes boricuas que conforman este exitoso dúo de exponentes del Hip Hop y el Reggaetón constructivo.
Para finalizar, cabe decir que sencillamente, se dejó por lo alto un género considerado por muchos como música hecha para las clases populares. Se demostró que se puede invertir en hacer buenos eventos, para recoger posteriormente una buena cosecha. Es innegable que los discos de Picco, tienen un movimiento comercial interesante y que su música suena muy bien en diferentes radioestaciones locales, que seguramente lo mantendrán en los principales listados de popularidad durante un buen tiempo.
Por: Germán «Chote» Garavito
Fotos: Mónica Ángel Díaz
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