¿Cómo comenzaste el día? ¿Cuál fue el primer sentimiento que cautivó tu corazón? ¿Qué actitud marcó tu mañana? ¿Recuerdas cuál fue la primera idea que surcó por tu mente?
Según algunas estadísticas, la mayoría de los seres humanos inicia el día en una nota negativa. Abren la puerta a cada mañana convencidos de que son desfavorecidos y que la vida ha sido injusta con ellos. Desayunan afirmando que son víctimas de lo malo, lo trágico y lo fatal. Comienzan el día controlados por un ánimo de protesta. Son amigos de la queja. Así dan la bienvenida a cada amanecer.

(Photo by: Pixabay)
¿Sabías que cuando nos levantamos con una actitud negativa tenemos casi asegurado un día malo, cargado de sin sabores y experiencias desagradables? Ante el negativismo las relaciones interpersonales se tornan tensas, la paciencia disminuye y el nivel de tolerancia desaparece con mayor rapidez. Además, el estrés y la ansiedad invaden con mayor facilidad, afectando la salud física, mental y emocional.
Estas y muchas razones más, nos confirman que la actitud negativa en la mañana puede robarnos la felicidad el resto del día. Nada ganamos al permitir que el comienzo de una mañana sea marcado por el pesimismo.
Lo cierto es que si nos detuviéramos por un momento a evaluar nuestra realidad, descubriríamos que no hay razón para comenzar un día con quejas y protestas. Esto es así pues, la mayoría de nosotros está en la lista de los seres humanos más privilegiados del mundo. Pertenecemos a un grupo del planeta que ha recibido la mayor cantidad de favores. Somos un sector de la humanidad que disfruta de los mejores beneficios que ofrece la creación de Dios. Nos sobran los recursos para enfrentar los diversos retos que nos trae la vida.
Un autor desconocido puso en orden las siguientes bendiciones que generalmente pasamos por alto, pero que nos recuerdan cuan privilegiados y favorecidos somos en comparación con la mayoría de las personas del planeta.

(Photo by: Pixabay)
Si te has despertado hoy con más salud que enfermedad, estás más bendito que el millón de personas que no va a sobrevivir esta semana.
Si nunca has conocido los peligros de la guerra, la soledad de la prisión y los dolores del hambre, estás delante de 500 millones de personas en el mundo que lo están experimentando.
Si puedes ir a la Iglesia, al Templo o seguir tu credo particular sin ser perseguido, estás más bendito que 3 millones de personas en este planeta que no pueden disfrutar de ello.
Si tienes comida en tu nevera, llevas la ropa limpia, si tienes un techo que te cubre, y un lugar seguro donde dormir, eres más rico que el 75% de los demás.
Si tienes dinero en el banco, en tu cartera, o unas pocas monedas en una jarra en tu casa, eres parte del 10% de la población próspera del mundo entero.
Si tus padres están todavía vivos y casados eres un caso poco común.
Si llevas una sonrisa en tu cara, y estás agradecido por todo estás bendito, porque la mayoría de la gente lo puede hacer pero no lo hace.
Y si puedes tomar la mano de alguien, abrazarlo o solamente tocar su hombro, estás bendito porque puedes ofrecer el toque divino que sana.
Como ves, la vida no ha sido tan injusta contigo. Dios te ha bendecido de muchas maneras y ha puesto en tus manos lo que muchos seres humanos nunca podrán disfrutar. ¡Dios te ha dado mucho! Por eso la importancia de aprender a contar las bendiciones y descubrir cuan privilegiado eres.
Lo más apropiado, entonces, es comenzar la mañana movido por un corazón agradecido. Cuando empiezas el día inspirado por un espíritu de genuina gratitud te aseguras una jornada de mucha paz, salud y serenidad. Vive agradeciendo diariamente toda la bendición que has recibido. Da la bienvenida a cada amanecer dando gracias y con la expectativa de que Dios tiene algo más para ti. Así lo promete la Biblia: «las misericordias de Dios son nuevas cada mañana.» (Lamentaciones 3.22).
¡Qué gran bendición! Eres tan privilegiado que Dios ya te anticipa una bendición nueva y fresca para el día de mañana. Las misericordias, manifestaciones de amor y expresiones de bondad del Creador de los cielos y la tierra seguirán siendo una realidad en tu vida todos los días.
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