«El amar y ser amado es sentir el sol en ambos lados». Bárbara Johnson
Amor
El amor más grande…
Es inolvidable cuando una persona ofrenda su vida para que alguien a quien ama pueda vivir.
Amor verdadero
Dios no nos ama sin condiciones para amarnos. En Jesucristo podemos ver que Dios nos ama sin importar lo que hayamos hecho mal. Él nos dice: “vengan a mí arrepentidos, porque a través del sacrificio de mi Hijo, de su sufrimiento y muerte inocente, les he perdonado amorosa y completamente”.
La verdadera soledad
La verdadera soledad se suple con; nuestra familia, amigos, y en su tiempo, con nuestra pareja ideal. La necesidad de amor de Dios, que frecuentemente confundimos con soledad, solamente puede ser suplida al estar un tiempo cada día con nuestro Padre celestial y escuchar su corazón decirnos: «Te amo hijo mío».
¿Podemos vivir sin amor?
La vida sin amor no tiene sentido.
¿Quién no ha sido herido por un amado?
El solo pensar que podemos meter mano sin saber qué vamos a sacar, o saber que al brindarnos el resultado será decepción: nos aterra. Pero el que ama a la «amor de Dios», encuentra la correspondencia a ese amor solo en Dios, por tanto no necesita, sino que tiene y da de la abundancia de ese amor que viene del Padre.
El amor «inestrenado» que todos llevamos por dentro
El amor nos hace libres para elegir, para actuar, para pensar y para sentir.