Uno como cristiano debe tener convicciones y creencias firmes. Debemos colocar toda nuestra confianza en Dios, pues es necesario vivir según la voluntad del Señor y no según nuestros deseos. No importa lo que esté pasando en tu vida ahora, si tienes problemas personales, financieros, o de cualquier otro tipo, siempre debes confiar al 100% que Dios te ayudará.
Cuando dejamos nuestra vida en sus manos y nos entregamos completamente a Él rindiéndonos a sus pies Él nos librará de los problemas, nos dará las soluciones, pues para Él nada es imposible. Sólo necesitamos tener Fe y mantenenos en contacto con el Señor mediante oración, lectura de la palabra y alabanza.

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Un ejemplo de confianza y firmes convicciones se puede ver en el libro de Daniel que se encuentra en el antiguo testamento de la Biblia. Allí relatan la historia de Daniel y tres amigos. Desde muy jóvenes, ellos tenían fe en Dios, a pesar de que su pueblo fue invadido. Por esa razón, cuando se los llevaron obligados al Reino de Nabucodonosor, no dejaron sus creencias, aun cuando querían obligarlos mediante edictos y decretos reales.
A Daniel y a sus amigos, les prohibieron orar a Dios y ellos no obedecieron a hombres, sino que mantuvieron su fidelidad a Dios. Como consecuencia a su desobediencia, Daniel fue arrojado a los leones hambrientos y sus amigos a un horno de fuego. En ambas situaciones todos salieron ilesos, porque tenían total confianza en Dios, y dejaban su vida según la voluntad del Señor.
Desde el punto de vista humano, ante estas situaciones era imposible vivir, pero no desde la perspectiva del poder de Dios. De manera que no importa qué problema tengas, descansa en Dios y entrégale tus cargas y Él te ayudará. Pide lo que necesitas y si es la voluntad del Padre Él te responderá. Él es fiel con sus hijos y los prosperará si hacemos cosas que son agradables para Él.
Las respuestas a nuestras oraciones, pero eso es porque en el mundo espiritual hay una guerra, el adversario quiere bloquear toda bendición que venga de Dios, por eso hay que mantenerse en oración y vigilante a todo, debemos vivir de manera espiritual y no carnal. En el libro de Daniel se demuestra el bloqueo que intenta el enemigo para que nos llegue la ayuda o respuesta que necesitamos, pero ya el enemigo está vencido, gracias al sacrificio del Señor Jesucristo. Nosotros tenemos una ventaja con respecto a Daniel, en su época aún Jesús no había venido a la Tierra, a Daniel le enviaban un mensajero o ángel para dar la respuesta a las oraciones, pero nosotros, hoy día tenemos al Espíritu Santo. Estamos conectados directamente con el Padre y el Hijo mediante el Espíritu Santo que habita en nosotros. De igual manera el adversario intentará que no te llegue la respuesta, o que no la veas. Siempre debemos observar con el ojo espiritual.
Debemos pedirle a Dios que nos enseñe a identificar cuáles son nuestros talentos y dones, también que nos dé sabiduría para usarlos de la mejor manera según su voluntad. Recuerda que debes pedir de la manera correcta, pide en nombre del Señor Jesucristo y se te dará si es la voluntad del Padre y no es un deseo de la carne. Sé que es complicado todo lo que he escrito, algunas veces existirán dudas, te preguntaras ¿por qué te pasa esto a ti?, pero no pierdas la Fe, Dios puede estar probándote, así que ten fuerza, confía en Él. Tus problemas bloquean tu vista espiritual, y no te das cuenta que Cristo está contigo, sólo piensa en Dios, habla con Él y verás la situación de una manera diferente. No creo que tus problemas sean literalmente estar en un horno de fuego o encerrado con leones hambrientos.
Te recomiendo que leas la Palabra de Dios todos los días, así te acercaras cada vez más a Él y lo conocerás mejor, vive según sus enseñanzas, así harás las cosas conforme a su voluntad, has cosas que sean de su agrado y te prosperará. “Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas. Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien” Josué 1: 7-8 “Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará”. Salmos 37:5 “En Dios he confiado; no temeré; ¿Qué puede hacerme el hombre?” Salmos 56:11
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