Colombia (Cristianos.com).- Elenco, una de las revistas de farándula más importantes de la prensa colombiana ha publicado un importante artículo sobre lo “atípico” de la relación del cantante Giovanni Olaya y su esposa, la hermosa modelo Vanessa Garzón.
“El Pescao” y “La Mojarrita” como se les conoce en los círculos sociales del “País Cafetero”, siguen brillando dentro de un medio hostil gracias a la sabia manera como han dirigido sus respectivas carreras, al ser creyentes comprometidos que se desenvuelven exitosamente en la escena secular.
La interesante nota de una página, con foto a todo color, relata interesantes pormenores referentes a la manera como la pareja se conoció al interior de la iglesia Casa Sobre la Roca en la Ciudad de Bogotá; una congregación que históricamente ha trascendido con nombres de alta relevancia como los pastores Darío Silva-Silva y Silvano Espíndola, el futbolista Falcao García, el cantante Moisés Angulo e incluso el diseñador Giovanni López.
Afirmaciones impactantes tales como la manera en que la bella modelo ha rechazado propuestas y desfiles por el hecho de que le piden posar en ropa interior, anunciar licores, cigarrillos o preservativos, así como el respeto de famosas bandas comerciales hacia la labor y la fe del líder de Pescao Vivo, muestran la radicalidad de una pareja de jóvenes que a sus tres años de matrimonio, no se arrepienten de haber guardado su sexualidad conforme a un mandato Divino.
Vale la pena resaltar también, importantes aspectos como la tentación y “las calenturas” vividas por el cantautor en algún momento de su soltería o la manera como la modelo entrega su sexualidad como pacto a un Dios que le daría las fuerzas para llegar al altar de la mejor manera, tal cual está establecido en La Biblia.
Así pues, continua el exitoso curso de esta joven pareja de famosos, que no sólo triunfa al interior del circuito Góspel, gracias a su compromiso y pasión por el Dios vivo, sino en la escena comercial gracias a su estilo de vida basado en una sencilla premisa: En todo tiempo predica y si es necesario…Habla.
Por: Germán “Chote” Garavito
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