¿Cómo hacerle frente al trastorno bipolar?

Miles de personas sufren de trastorno bipolar (cambios de humor severos). ¿Cómo pueden los cristianos hacer frente a esta enfermedad? ¿Buscar ayuda médica para la condición sería un acto de «falta de fe»?

(Imagen: Pixabay-AdobeSpark)

Cuando a una persona la diagnostican con un trastorno bipolar, lo que significa es que tiene severos cambios de humor. Necesitan estabilidad en su vida para tener bienestar en su estado bipolar, pero se preguntan: ¿Por dónde empiezo? ¿Qué busco? ¿Cómo puedo juzgar lo que estoy haciendo?

El buscar ayuda identificando la causa de su comportamiento es el primer paso. Estar en Cristo, independientemente de sus problemas emocionales, ya es un gran adelanto.

Para aquellos no familiarizados con el término «bipolar», es simplemente el nombre elegante para referirse a los cambios de humor. Pero no se trata de pequeños cambios de estado de ánimo que experimenta la mayoría de la gente. La persona bipolar experimenta grandes cambios de humor que van de un extremo a otro. Otro nombre común de esta enfermedad es «trastorno maníaco-depresiva».

Durante la fase maníaca los enfermos se sienten muy animados, tanto mental como físicamente, desorganizados, a menudo en un estado sin control o incontrolables. Entonces, después de un tiempo de esta manía, vienen los cambios de humor para un estado de depresión y la gente cae en un letargo y, a veces con tendencia al suicidio.

¿Se puede depender de la fe para mantener la condición bajo control o la oración para la curación? Sí, pero de acuerdo a Santiago 2, su fe debe ir acompañada por las obras. En este caso significa escuchar a su médico.

Hay que mantener la fe en el hecho de que Dios está trabajando a través de los médicos. ¿Tiene confianza de los médicos de Dios? Bueno, sabemos que ocupó a Lucas, el médico de una estima suficientemente alta como para que le permitiera escribir el tercer Evangelio.

¿Es su médico cristiano? Magnífico si él o ella lo es, porque aunque este no debe ser el factor determinante siempre, es bueno saber que su médico está orando por usted además de atenderlo.

¿Qué pasa con los medicamentos?

Una de las cosas importantes que puede hacer para mantener su equilibrio emocional es que siga tomando sus medicamentos que su médico le recomienda. Sin embargo, después de un tiempo de medicinas, usted pensará que está bien, y tendrá la tentación de dejarlos y su montaña rusa comenzará de nuevo. A menudo las personas abandonan sus medicamentos debido a efectos secundarios. Consulte con su médico acerca de posibles efectos secundarios, y busque su consejo.

Independientemente de los efectos secundarios usted necesita mantener su fe en que los medicamentos son el menor de dos males. En su amor y su misericordia, el Señor permitió que estos medicamentos se inventaran. Véalos como un regalo de Dios.

Su camino en la vida

Si le diagnosticaron como bipolar, no debe sentirse avergonzado, sino más bien aliviado. Seguramente su vida ha sido un caos, y la gente que le rodea debe haber pensado que estaba mal de su mente. Pero la bipolaridad no es un estado de locura sino simplemente un desequilibrio químico en el cerebro.

Mucha gente tiene un desequilibrio químico en su cuerpo, aunque por supuesto es mucho más grave cuando los productos químicos son los que están en su cerebro. Sin embargo, eso no quiere decir que esta condición le vuelva inútil para el Señor y para la sociedad.

Usted puede mantener los productos químicos del cerebro en equilibrio con el medicamento adecuado. El resultado probablemente nunca será «perfecto», porque usted tiene una enfermedad, pero su éxito en la vida dependerá de su actitud acerca del medicamento.

Al igual que lo hizo con Jesús en el desierto, Satanás le tentará a hacerlo por su cuenta. Pero al igual que Jesús, no debe poner a prueba a Dios (Mateo 4:7), sino simplemente confiar en él.

Entonces, ¿dónde debe empezar? Bueno, lo primero que debemos hacer es olvidar todas las malas decisiones del pasado. Pablo tenía toda la razón en Romanos 8:01 cuando dijo: «Por lo tanto, no hay ahora condenación para los que están en Cristo Jesús, porque en Cristo Jesús la ley del Espíritu de vida me puso en libertad …».  Si usted está en Cristo, siga adelante con fe y confianza tome sus medicamentos según su médico le ha indicado y deje que Dios permita que estos trabajen efectivamente en su condición.